Reflexionando: Crianza consciente
- Carla Watson

- 30 oct
- 6 Min. de lectura
Bienvenido a reflexionando ando, un espacio no estructurado para ventilarte algunas reflexiones recientes. Hoy quiero compartirte algo que deambula por mi mente, sobre ser mamá y big feelings.

El otro día pensaba en la idea de normalizar sentirnos triste, no con el fin de alargar la experiencia sino para enseñar a mi hija a sentir y atravesar esas emociones (que incluso para los adultos a veces se nos quedan grandes).
He ido pensando todo esto mientras mi mamá me visita y se queda en nuestra casa por 6 semanas. Y justo antes de ella mi papá por 10 días. Así que han sido semanas de mucha intensidad para mi yo adulta pero también para mi niña interior. Así que me he regalado muchos momentos de calladas reflexiones.
De pensar entre muchas otras cosas como hemos normalizado hasta cierto punto el traer nuestra atención a la dirección opuesta de la incomodidad del sentir. Sobre todo esos sentimientos con "mala fama" (tristeza, ira, vergüenza, etc).
Y como en muchos casos de manera inconciente es lo que sin querer le hemos como sociedad perpetuado/ continuado enseñado a tantas generaciones los mismos patrones que no tienen tan enfermos.
Ahora que soy mamá y me doy más tiempo para pensar en estas cosas y creo que aunque ellos, lxs peques, no puedan ponerlo en palabras lo que pueden llegar a sentir. Es decir si los adultos a su alrededor solo le tratan de enseñar como huir de lo que sienten acaso no estamos invalidamos sus sentimientos, creando más heridas, dejando que esos sentimientos no procesados se vuelvan el charco de agua turbia perfecto para que cosas feas proliferen en el?
Y wow que duro es poner toda esta teoría en práctica... algo que al leer muchos libros de crianza que sugieren lo mismo: crear espacio para sostener su sentir es importante para ellos y (surprise surprise) para nosotros también. Toda esta "pensadera" comenzó en algún momento cuando comenzó a hacerme responsable de mi herida materna y paterna pero con los años la motivación se transformó sobre cómo convertirme en la mamá que quiero ser para Acacia y al trabajar mis propias heridas he llegado a "meterle mente" y corazón a este tema, tratando de encontrar mi propio camino.
Así que como parte de la crianza consciente que quiero/queremos para nuestro rayito de sol es enfrentarnos juntos a esa incomodidad (porque sí que puede ser un poco incómodo y a la ves tan pero tan importante sentarnos con los sentimientos, con la incomodidad, no para quedarnos de luto vestidos de ellos por siempre y para siempre pero para dejarnos atravesar el curso natural),
Creo que (y digo creo porque para nada soy experta en esto, apenas tengo un par de años en este rol que no dudo me regalará plot twists hasta el último de mis alientos) esto significa reconocer o pues ayudarle a reconocer a mi hija de manera simple, sin juzgarle o juzgarme a mí misma esos big feelings.
Quizás con palabras como "hey veo que estás triste/molesta/decepcionada/frustrada... aquí estoy para ti" y luego de darle un momento introducir la siguiente cosa que nos puede ayudar a continuar.
Y recordar que todo comienza desde el ejemplo y en cómo me continuará tocando a mi también abordar mis propios big feelings..
Y es duro hacer malabares con las expectativas que uno tiene para sí mismx como padre/madre, ah y sin mencionar los intentos de la vida de sacudirnos... a veces de manera repetitiva.
También hay un tema con nuestros sistemas nerviosos constantemente en flight or fight y como regularnos no es siempre una tarea facil/sencilla/natural y como todo esto impacta nuestro desempeño deseado en este rol sagrado que es acompañar a nuestros hijos en su vida y desarrollo.
O a veces incluso puede que nos sintamos regulados listos para hacer la mejor crianza consciente y de repente booom nos enfrentamos a algo que como un gatillo desencadena una serie de sensaciones y emociones en nuestro propio niño interior y nuestro adulto exterior no sepa que hacer con "dos" pequeños en crisis ante su cuidado.
Pero esos dos serán temas para conversar más profundamente en otro momento.
Te digo porque se lo frustrante que puede ser aveces sentirse impotente ante los sentimientos tan grandes de los niños y se que tu también que me lees al igual que yo y muchxs otrxs quieres ayudarle a tu pequeñx a crecer en un hogar donde sentir no es el enemigo, donde expresar lo que sentimos no es tabú, a sentirse cómodos en su piel tal cual como son
Creo que en este camino de (tratar de) proveer una crianza consciente/respetuosa o como sea que le digan ahora, hay que
1. Ser compasivos con nosotros mismos como madres/padres/criadores
2. Todo empieza con tomar consciencia (aunque en el momento no hagas todo "perfecto")
3. No hay forma de ser una mamá perfecta, pero puedes ser una mamá conectada, consciente, respetuosa y compasiva
4. A veces lo mejor que puedo hacer no es buscar una solución/distraer sino sentarme a acompañar a mi hija a sentir, a escucharla en esos momentos de emociones grandes.. y quien sabe aunque al principio no se sienta natural poco a poco eventualmente ella de una manera u otra terminará enseñandome a mi también que ir despacio y crear espacio es medicina para toda la familia.
5. muy muy importante tomar responsabilidad de nuestras heridas, de nuestra desregulación emocional y buscar herramientas que nos ayuden a regular nuestro sistema nervioso / nos ayuden a atravesar esos momentos de desregulación. Que funciona para mi? Una combinación de moverme conscientemente, terapia somática, crear una conexión con mi comunidad, convivir con la naturaleza y de nutrir mi cuerpo.
También he pensado como a quien sea que tome la decisión de abordar este viaje y este proceso de romper con patrones de aprender a hacer las cosas de formas distintas y que no necesariamente llegan de manera natural. Pero todo eso es parte de criar conscientemente supongo. Reconocer que no tenemos todas las respuestas y de estar abiertos a seguir aprendiendo y ajustándonos a las necesidades de nuestros bebés.
Definitivamente he aprendido mucho a convertirme en un receptáculo de emociones porque mi rol de mamá muchas veces se reduce a eso callarme, escucharle y acompañarla a sentir para que cuando sea grande ella (en teoría) pueda (ojalá) regularse mejor que yo cuando estoy en momentos de emociones "grandes" 😅
Si tu estás buscando orientación para inspirar tu viaje de crianza consciente aquí hay algunos libros que te recomiendo:
The Book You Wish Your Parents Had Read (and Your Children Will Be Glad That You Did) by Philippa Perry
HUNT, GATHER, PARENT: What Ancient Cultures Can Teach Us about Raising Children by Michaeleen Doucleff
The Danish Way of Parenting: What the Happiest People in the World Know About Raising Confident, Capable Kids by Jessica Joelle Alexander and Iben Dissing Sandhal
The Whole-Brain Child: 12 Proven Strategies to Nurture Your Child's Developing Mind by Daniel J. Siegel and Tina Payne Bryson
Y para todos los interesados en explorar mi trabajo como terapeuta somática y cómo ayudo a mis clientes a regular sus sistemas nerviosos, puedes agendar una llamada de exploración aquí.
Gracias por leerme, un abrazo x

Sobre Carla Carolina Watson
Carla Carolina Watson es una Coach de Vida acreditada, certificada en Programación Neurolingüística (PNL) y EFT, es Hipnoterapeuta Clínica, terapeuta somática con certificación Holosomatic Bodywork Therapy. facilitadora de Breathwork y profesora de Yoga.
Durante los últimos 7 años ha trabajado en la industria del bienestar, creando espacios seguros donde las personas pueden soltar lo que les pesa y enfocar su energía en lo que realmente importa, mientras abrazan su versión más auténtica y equilibrada.
Carla ha trabajado en reconocidos centros de bienestar en Reino Unido, estudios de yoga en Reino Unido y Panamá, sesiones individuales con personas de todos los continentes y facilitando espacios de bienestar para empresas que desean apoyar a sus equipos.
Su enfoque único ofrece a sus clientes distintas opciones para explorar lo que mejor se adapta a sus objetivos. A través de sus servicios puedes trabajar en temas como: fobias y miedos, autoconocimiento, resiliencia emocional, manejo del enojo, comunicación, gestión del estrés y más.
Desde que se convirtió en madre hace casi tres años, ha dedicado su trabajo a crear espacios de sanación para mujeres y madres, integrando prácticas creativa y somáticas como Baños de Sonido, Canto y Escritura Terapéutica, Círculos de Mujeres y Talleres de Creatividad y Bienestar.
Como inmigrante, hija única y madre Carla reconoce como en muchos casos carecemos de esa "aldea" tan necesaria para darnos compañía y "medicina" en diferentes etapas de nuestra vida, por eso ella cree vehementemente en que si no contamos con una "aldea" nos toca crear y nutrir una a través de estos espacios.
Sus servicios también están disponibles para crear encuentros privados personalizados, como: Mother Blessings, Despedidas de Soltera con propósito, festivales y más.
📩 Para más información, contactar:




Comentarios